01 Ago BUSCAR APRENDER ES UN MANDATO GENÉTICO.
¿Sabías que buscar aprender es un mandato genético? Y por otro lado, según estudios, nuestra capacidad de aprendizaje medida en “Coeficiente Intelectual” ¡parece ser determinada completamente por los mismos genes, y no por educación ni por cultura!
En ©Psico-Marketing, si tu producto o servicio representa la posibilidad de aprendizaje, entonces sin duda es algo que debes enfatizar.Les comparto más información sobre el tema en el artículo de la semana.
DESEO DE PROTECCIÓN Y FAMILIA
#ArtículoDeLaSemana
©Psico-Marketing – Inspira y Vencerás Segunda Fuerza: Deseos Instintivos
(Deseos inconscientes que nos mueven por supervivencia y reproducción)*Sobre Genética y autocontrol.
2.6 Los 12 Detonadores Instintivos del ©Círculo del Ser y la Genética moderna
Dentro de la Dimensión Instintiva de ©El Círculo del Ser propongo un listado de 12 detonadores que corresponden a necesidades o deseos instintivos que crean una tendencia de comportamiento.
7. Deseo de aprendizaje
No solo ser capaces de aprender, sino también desear aprender, ha sido fundamental para la evolución del ser humano.
Ser mejores a través del aprendizaje es algo que nos mueve. Aunado a nuestras capacidades de retener información (memoria), procesarla (razonamiento) y comunicarla (lenguaje/arte), este instinto ha hecho al hombre la especie dominante del Planeta. Todo ello no serviría de nada si no buscáramos obtener esta información originalmente por naturaleza.
Un ejemplo muy claro en otra especie lo podemos ver con los delfines. Constantemente prueban tácticas nuevas de caza, aprenden de su experiencia, la recuerdan, procesan esa información, la enseñan a sus grupos y familias y así logran transmitir dichos aprendizajes por generaciones. Por supuesto que esto también les da una gran ventaja de supervivencia.
Referencia Genética:
Los genes determinan nuestro apetito por aprender y nuestra capacidad de procesar ese aprendizaje racionalmente.
Esta referencia me parece de lo más interesante, es una contundente prueba de que nuestro Coeficiente Intelectual lo determina principalmente la genética.
Se ha hablado mucho de la influencia de la educación y el estilo de vida en el Coeficiente Intelectual de una persona. Sin embargo los resultados experimentales parecen responder a este debate claramente:
“Otros estudios, mientras tanto, se concentran en comparar el Coeficiente Intelectual de personas adoptadas, con el de sus padres adoptivos y el de sus padres biológicos o sus hijos. Pon juntos todos estos estudios, acumulando las pruebas de CI de decenas de miles de individuos, y la tabla luce como verás a continuación. En cada caso el número es una correlación porcentual, cien por ciento de correlación, siendo una perfecta identidad y cero por ciento siendo arbitrariamente diferente.
Misma persona probada dos veces 87
Gemelos idénticos criados juntos 86
Gemelos idénticos criados separados 76
Cuates criados juntos 55
Hermanos biológicos 47
Padres e hijos viviendo juntos 40
Padres e hijos viviendo separados 31
Niños adoptados viviendo juntos 0
Personas sin ninguna relación 0
No es de sorprenderse, la correlación más alta es entre gemelos idénticos criados juntos. Compartir los mismos genes, el mismo vientre y la misma familia, son indistinguibles de una misma persona tomando la prueba dos veces.” – Matt Ridley
Lo más increíble de estos resultados es que en el caso de niños adoptados viviendo juntos la correlación es 0. Esto significa que la forma en que un niño es criado tiene un nulo impacto en su Coeficiente Intelectual.
En estos casos es que podemos darnos cuenta de la inmensa influencia que tienen los genes sobre nosotros.
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MULTI-SER
en busca de sentido
¿Por qué deseamos?
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